Con casi un millón 800 mil toneladas de caña molidas y contra todos los pronósticos por la presencia del Covid-19 y problemas de lluvia, este miércoles culminó la zafra 2020-2021, que alcanzó la producción de 172 mil toneladas de azúcar.
En un principio la zafra, que inició el 14 de diciembre de 2020, estaba programada para finalizar el 18 de mayo, sin embargo se extendió dos meses más debido a la recuperación en la producción que provocó un aumento en el estimado de molienda que pasó de un millón 514 mil toneladas a casi un millón 800 mil.
Los números duplican la cosecha de la zafra 2019-2020, cuando los cañeros apenas alcanzaron las 900 mil toneladas debido a los estragos de la sequía severa, que también dejó mil millones de pesos en pérdidas.
La zafra 2020-2021, fue una de las más complicadas por realizarse en medio de la pandemia. Las dos organizaciones cañeras y el ingenio San Rafael de Pucté llevaron a cabo cursos de capacitación a cabos y comisionados de cosecha sobre cómo prevenir contagios entre los más de dos mil 800 cortadores que laboraron durante varios meses, provenientes de estados como Chiapas, Oaxaca, Veracruz y Tabasco.
El presidente de la Unión Local de Productores Cañeros (ULPC), Evaristo Gómez Díaz, reconoció que fue una de las zafras más complicadas por el tema de la pandemia, pero se superó el objetivo sin pérdidas que lamentar.
Indicó que las siembras, cosecha y venta al ingenio durante la zafra, permitirá a los productores tener ingresos aceptables, especialmente porque hay un buen precio acordado para la gramínea el cual cerró en 850 pesos por tonelada para la liquidación final.
El presidente de la Asociación Local de Productores de Caña, Benjamín Gutiérrez Reyes, recordó que la región que abastece al ingenio azucarero, siembra arriba de las 30 mil hectáreas de caña, las cuales abarcan más de 20 comunidades rurales de la ribera del río Hondo y de la zona Ucúm- Escárcega, del municipio de Othón P. Blanco.
De Sipse. Novedades de Quintana Roo. Jueves 29 de julio de 2021.