Un reciente estudio del Centro CICERO de Investigación Climática Internacional en Noruega advierte sobre el rápido aumento de las condiciones meteorológicas extremas en los próximos 20 años. Según la investigación, casi tres cuartas partes de la población mundial podrían enfrentar cambios drásticos en el clima si no se reducen rápidamente las emisiones de gases de efecto invernadero.
Publicado en la revista Nature Geoscience, el estudio analiza cómo el calentamiento global, combinado con las variaciones climáticas naturales, podría desencadenar períodos de una década con rápidos cambios en las precipitaciones y temperaturas. “Nos centramos en los cambios regionales, debido a su mayor relevancia para la experiencia de las personas y los ecosistemas en comparación con la media mundial”, explicó la Dra. Carley Iles, autora principal del estudio.
Fenómenos naturales como El Niño ya están provocando picos de precipitaciones y temperaturas, pero a medida que el planeta se calienta, estos eventos extremos podrían superar la capacidad de adaptación de las sociedades y los ecosistemas. En un escenario con pocas reducciones de emisiones, regiones como el Mediterráneo, el noroeste y el sur de América y el este de Asia podrían experimentar “tasas de cambio sostenidas y sin precedentes durante dos o más décadas”.
Las simulaciones climáticas utilizadas en la investigación revelan que alrededor del 70% de la población mundial, es decir, 5.600 millones de personas, deberían prepararse para cambios significativos en temperaturas extremas y precipitaciones en un futuro con altas emisiones. Los países de renta baja, especialmente vulnerables a estos fenómenos, estarían entre los más afectados.
Incluso en un escenario con grandes esfuerzos de mitigación, siguiendo los objetivos del Acuerdo de París, alrededor del 20% de la población mundial, unos 1.500 millones de personas, se verían afectados. Los cambios más drásticos en este escenario se centrarían en la Península Arábiga y el sur de Asia.
El Dr. Bjørn H. Samset, del Centro CICERO, subraya la necesidad de prepararse para esta situación: “La única manera de hacer frente a esto es prepararse para una situación con una probabilidad mucho mayor de fenómenos extremos sin precedentes, ya en las próximas una o dos décadas”. Los investigadores advierten de las consecuencias potencialmente mortales, desde olas de calor hasta inundaciones, si no se toman medidas adecuadas para la adaptación climática.
De: Euro.News
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