La presente zafra se perfila como una de las peores en los últimos años para los productores cañeros del ingenio San Rafael Pucté, quienes enfrentan severas adversidades que han impactado negativamente en su producción. A pesar de haber logrado un incremento en el Kilogramo de Azúcar Recuperable Base Estándar (KARBE) a 77 puntos en días recientes, esta cifra se mantiene como la más baja a nivel nacional entre los 48 ingenios azucareros del país.
Diversos factores han contribuido a esta crisis. Entre ellos se encuentran la afectación por el hongo fusarium, la mosca pinta, así como fenómenos climáticos adversos como inundaciones y sequías. Estas condiciones han dejado a más de tres mil productores cañeros en números rojos, provocando que en lugar de recibir el pago correspondiente a su primera liquidación, el sector registra un adeudo superior a los 12 millones de pesos con la agroindustria.
En comparación con la zafra de 2018-2019, cuando se perdió el 50 % de la producción, la situación actual es más crítica debido al bajo precio del azúcar y a un KARBE que se mantiene por debajo de los 100 puntos. Durante este periodo, se ha registrado la pérdida de más de 12 mil hectáreas a causa del hongo fusarium, lo cual ha reducido significativamente la producción esperada. De las 60 toneladas por hectárea proyectadas, únicamente se han logrado recolectar entre 20 y 30 toneladas por hectárea.
De acuerdo con Por Esto, otro de los problemas que enfrentan los productores es el endeudamiento debido a la adquisición de maquinaria para la cosecha, ante la falta de mano de obra ocasionada por la migración de trabajadores hacia las obras del Tren Maya. La mala cosecha ha provocado que muchos cañeros se encuentren en cartera vencida al no poder cubrir los créditos otorgados por el ingenio, además de aquellos que solicitaron préstamos a empresas financieras externas.
Además, numerosos productores deberán recurrir a voltear la sepa y sanear el suelo para poder sembrar nuevamente, lo cual representa un gasto considerable que se suma a las pérdidas ya sufridas. A esto se agrega la necesidad de pagar las cuotas correspondientes al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Las comunidades más afectadas por esta situación se localizan en la zona norte, que abarca desde Allende hasta Juan Sarabia, y en la zona sur, desde Sabidos hasta La Unión.
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