Con la reforma eléctrica que propone la federación se busca depender cada vez menos de los combustibles fósiles y aprovechar más las energías renovables y sobre todo, limpias en todo el país, aseveró Carlos Andrés Morales Mar, director corporativo de Operaciones de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
En visita a Imagen del Golfo destacó la importancia de usar los recursos que ofrece cada región, sean hidráulicos, eólicos, geotérmicos, entre otros, para reducir la dependencia de los hidrocarburos e incluso fomentar la producción de dispositivos e infraestructura a nivel nacional y regional.
Hasta ahora la alternativa más utilizada es la energía hidráulica, mediante presas que aprovechan el caudal de los ríos para producir electricidad y distribuirla a puntos incluso distantes de donde se genera, con la ventaja de que no hay contaminación al ambiente. Además, con cada lluvia se renuevan los cuerpos acuáticos.
La energía eólica se produce de manera importante en el Istmo de Tehuantepec, y hay infraestructura y parques que recuerdan a los molinos de viento, además de corrientes de aire todo el año y no se depende de las estaciones. En Coahuila también existen condiciones por la generación de frentes fríos procedentes de Norteamérica.
La geotérmica es otra opción y área de oportunidades, para lo cual se utiliza el vapor procedente del subsuelo; además, al condensarse ese vapor, vuelve ya convertido en agua al pozo de donde se obtiene y se restablece el ciclo generador, en total proceso de renovación del recurso hídrico. Citó una tecnología llamada ´de piedras calientes zetas´, en la que se hace pasar el agua, se recupera el calor en el agua, se sube, se mueve la turbina y se vuelve a inyectar. Pero no es la geotérmica normal, sino a base de piedras calientes secas.
El hidrógeno verde se obtiene a base de las energías renovables (solar, eólica, mareomotriz), pero el caso es que se pueda dar esa separación y producir hidrógeno, combustible que utilizan en los cohetes interespaciales. El hidrógeno convive con el gas natural y puede irlo desplazando en el tiempo conforme se vaya desarrollando esa tecnología, subrayó.
La biomasa es otra opción para generar energía. Como ejemplo, el funcionario federal explicó que se puede aprovechar cualquier vegetal, por ejemplo el bagazo de caña en zonas productoras de azúcar. “Ese bagazo se utiliza para generar energía, y la planta mientras tanto va creciendo y va teniendo ese poder de la fotosíntesis, donde va capturando el CO2 y va expeliendo oxígeno. La biomasa llega a las plantas bagaceras, se quema y en proporción lo que emiten de CO2 al quemar la caña se recupera por medio de la planta y sale en balance para llamarse energía renovable, limpia”, explicó Morales Mar.
La energía nuclear, como la que se produce en Laguna Verde y es limpia porque no contiene emisiones de bióxido de carbono (CO2), pero a diferencia de las anteriores, no es renovable.
Otra alternativa es la energía mareomotriz, que se genera a partir de los movimientos y aprovechamiento de las corrientes marinas pero con diferencias de temperaturas en el fondo. Mencionó que eso se da mucho por ejemplo en Baja California Sur, donde hay diferencias de niveles entre el Mar de Cortés y el Océano Pacífico. Pero es factible de aprovechar en cualquier zona costera.
En cuanto a la energía solar, que sí se utiliza a nivel doméstico o casero, el funcionario federal destacó que tiene un amplio potencial porque desde hace tiempo existen los paneles solares y de hecho los hay en las azoteas de varias viviendas.
Se requiere un contrato especial con la Comisión Federal de Electricidad porque se instala un medidor de flujo en los dos sentidos. “Cuando tú estés generando habrá excedentes que van a la red, y la red te los paga; cuando tú necesites porque ya se acabó el sol, la Comisión te da la energía y entonces ese intercambio de energía es muy positivo para la CFE (…), nosotros fomentamos ese tema, nada más que lo tenemos incluido con el nombre de generación distribuida”, subrayó Morales Mar.
El funcionario federal expresó que conforme las empresas en México produzcan los electrónicos que llevan esos paneles solares, habrá un mayor beneficio, y recalcó que la transición energética lleva a que cada vez participen más empresas mexicanas en la fabricación de los bienes de los paneles solares y en la fabricación de las turbinas para hacer aprovechamientos como en el caso del Soconusco, que es una cascada de puras centrales hidroeléctricas chicas, pero para beneficiar al café hasta llevarlo al nivel de exportación ya empaquetado y molido.
“Llegará el día en que nosotros hagamos todos esos productos de capital para producir las empresas mexicanas, las familias mexicanas, y se vayan desarrollando en ese sentido. Por eso es la importancia de tener una reforma eléctrica con visión y carácter social, y una rentabilidad ambiental también.
“Más que otra cosa, de una reforma eléctrica buscamos eso: a futuro que tengamos un sistema eléctrico que siga sirviendo para el progreso de la nación pero que además vaya cubriendo como en todo el mundo el uso de los recursos naturales y que cada vez dependamos menos de los hidrocarburos”, puntualizó.