• sáb. Oct 5th, 2024

La Secretaría de Agricultura refuerza acciones contra el uso de fuego en parcelas

Con la iniciativa “Mi parcela no se quema”, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural ha intensificado sus esfuerzos para capacitar, concientizar y difundir prácticas agrícolas alternativas al uso de fuego. El objetivo es reducir la incidencia de incendios forestales en el país.

Entre enero y mayo de 2024, el 34.7% de los incendios forestales fueron causados por quemas agropecuarias no controladas, poniendo en riesgo la vida de los productores, dañando los ecosistemas y degradando los suelos. “El suelo ha tardado cientos y hasta miles de años en formarse y por una práctica inadecuada, como es la quema, puede perderse y degradarse”, subrayó el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos Arámbula. Promover prácticas agrícolas sostenibles es crucial para garantizar la seguridad alimentaria de las comunidades rurales.

Desde 2020, “Mi parcela no se quema” ha promovido alternativas al uso del fuego en los sistemas de producción agropecuaria, como la reincorporación del rastrojo al suelo. Esta práctica no solo provee de materia orgánica al suelo, sino que también favorece la retención de humedad, disminuyendo así los accidentes que pueden provocar incendios forestales.

Villalobos Arámbula enfatizó que en la actual administración se han diseñado y puesto en marcha programas y acciones en beneficio de una agricultura sostenible. Estos programas consideran la promoción de la salud y cuidado de los suelos agrícolas, el uso adecuado del recurso hídrico y el mayor aprovechamiento de la agrobiodiversidad. Estas medidas son prioritarias para incrementar la productividad y el bienestar de las familias rurales, quienes se encuentran en el centro de la estrategia del sector agropecuario.

La quema de parcelas, aunque ancestral y utilizada por su bajo esfuerzo y tiempo, aumenta el riesgo de incendios forestales y causa daños severos a la biodiversidad. “En las parcelas causa la pérdida de organismos y microorganismos encargados de la descomposición de la materia orgánica, aireación del suelo y liberación de nutrientes, elementos indispensables para producir más y mejores cultivos”, explicó Villalobos Arámbula.

La incorporación del rastrojo al suelo, ya sea picado, molido o con maquinaria agrícola, actúa como cubierta protectora, manteniendo la humedad del suelo y previniendo la erosión causada por el viento y el agua. Esta acción es especialmente benéfica durante períodos de sequía o en regiones con suministro de agua limitado. Además, la descomposición de los rastrojos libera nutrientes, reduciendo la necesidad de aplicar fertilizantes químicos, y ayuda a suprimir el crecimiento de malezas al bloquear la luz solar que necesitan para germinar.

Aunque el fuego también se utiliza para controlar plagas y enfermedades, los avances en la agricultura de conservación y el manejo sostenible de los suelos permiten a los productores apoyarse en insectos, hongos y bacterias benéficas para controlar especies dañinas.

La Norma Oficial Mexicana NOM-015 Semarnat/Agricultura 2023 establece las especificaciones técnicas para el uso del fuego en terrenos forestales y agropecuarios. De observancia general y obligatoria en todo el territorio nacional, la Norma exige que quienes pretendan hacer uso del fuego presenten un Aviso de Uso del Fuego con un mínimo de 15 días naturales de anticipación a la autoridad competente.

Para facilitar el cumplimiento de la Norma, se ha desarrollado la aplicación móvil “Incendios y Quemas México“. Esta herramienta permite a los productores presentar el Aviso de Uso del Fuego sin necesidad de desplazarse hasta las oficinas municipales, expide un recibo electrónico con validez oficial y no depende de horarios de oficina.

De: SADER

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